La Catedral de Cádiz ha acogido esta mañana la celebración del Primer Domingo de Adviento, tiempo litúrgico que inicia el nuevo año para la Iglesia y que invita a los fieles a prepararse espiritualmente para la Navidad. La Eucaristía ha estado presidida por el Deán de la Catedral, el P. Ricardo Jiménez Merlo, quien también ha sido el encargado de bendecir la Corona de Adviento, signo central de este tiempo de espera.
Durante la celebración, el Deán ha resaltado el sentido profundo del Adviento como un período de vigilancia, esperanza y conversión.
Las cuatro velas de colores distintos: morada, verde, roja y blanca cada una con un simbolismo particular:
Morado: simboliza el espíritu de vigilia de este tiempo… «estad preparados».
Verde: simboliza la esperanza.
Rojo: simboliza la alegría por la cercanía del nacimiento de Jesucristo.
Blanco: es el color de la presencia de Dios.
